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martes, 3 de diciembre de 2013

¿Cómo llegué aquí? Mensajes del cielo


Dios me abrió la puerta y me invitó a un camino espiritual
Hace nueve años, comenzado ya el invierno, en ese momento entre el dormir y el despertar de la madrugada, recibí sensaciones desbordantes inalcanzables en la Tierra. Eran mensajes llenos de paz y amor con gran luz y un precioso paisaje del lugar a donde tenía que acudir.
Eso significaba que tenía que renunciar a todo mi pasado y también mi entorno. El mundo es grande, pero persiguiendo los mensajes se abre el camino. Sorprendida de mí, un largo viaje comencé, caminando sin conocimiento y por lugares desconocidos.
Doy gracias a mis hijos, quienes me aportaron más de lo que ellos son capaces de comprender. Me acompañaron en todo momento, buenos y no tan buenos, me mimaron y apoyaron, tolerando todos los cambios que he vivido, pues ellos dejaban atrás también su pasado. Fueron, son y serán una de mis grandes fuerzas.
Esos mensajes me guiaban al Gran Maestro y Creador del Sistema de Sanación Natural Tinerfe. Una persona sencilla, humana y muy espiritual, la gran riqueza de toda saiduría. Un gran amigo y amplio canal del amor de Dios en la Tierra.
Doy gracias a Dios por haberle transmitido tanta luz, amor y sabiduría al Gran Maestro Damián Álvarez, quien me ha dado respuesta a innumerables preguntas que durante más de treinta años se iban acumulando en mi mente. Desde que entré en su consulta puso en marcha la sanación de mi vida, transmitiéndome día a día sus conocimientos y sabiduría.
Doy gracias a Dios por todos esos mensajes, confianza, fierza y amor que puso en mí.
Ahora soy yo quien quiere enviarle mensajes a Dios y que él sienta lo mucho que lo amo y cada día quiero amarlo más a él y a su creación. Soy un canal de su luz y amor y que sea Dios quien me guíe cada paso que doy.
Confieso que antes de recibir estos mensajes de los que hablo ya había recibido más anteriormente, pero que, por mi rutina diaria y por no prestarles atención, no supe ver. Pero Dios me puso esta vez mensajes sin ninguna confusión.
Por todo ello doy gracias a mi gran maestro Damián Álvarez, creador del Sistema de Sanación Natural Tinerfe. Gracias por existir.